Bueno,. hoy empieza una aventura.. éste picudo colorado va en ruta hacia los Paises Bajos, pero primero a la capirucha, a ver a mi sister, ella es la que hizo posible esta locura.
Llegando por Toluca, tomando camióun a la ciudad de México…
En el vuelo, me entró de repente cierto nerviosismo al ver que la persona que estaba sentada al otro lado de mi (en un asiento que da al pasillo), de una manera desesperada buscaba por todos lados abajo del asiento y a los lados.
El angustiado personaje en cuestión, tenía como unos treinta años aproximadamente y llevaba un corte militar y su piel era de un color moreno claro.
Tras varios minutos de búsqueda infraganti en la cual con sus manos tocaba y re tocaba abajo del asiento y por todos lados, ya mostraba tal cara de desesperación, que me hizo pensar que tal vez se le había caído una granada de esas de mano con la que seguramente pensaba secuestrar el avion de Volaris en el que viajábamos.
De repente, el tipo tipo me volteó a ver. (seguramente al sentir mi mirada inquisitiva), y sentí tal pavor que pensé de inmediato gritar por ayuda a la aeromoza, sin embargo, el sujeto cortó mi intento de tajo al preguntar, con acento claro de la ciudad de México: «Oiga, pos ¿como le hizo pa’ reclinar su asiento?.»
Caray, no cabe duda que la televisión le hace a uno imaginarse cada cosa….